martes, 27 de febrero de 2018

“Uno es lo que ama…” y yo amo a un niño que es una Galería.


Ambos entramos como haciendo una travesura, empujamos la puerta suavemente hasta que nos delató un “llamador de ángeles”, ya estábamos dentro y nos sobrecogió el silencio luego de vencer el sonido del volantín delator. Nos quedamos callados y casi inmóviles, nos miramos y encogimos los hombros. Cada uno a partir de allí, voló por cuenta propia. Había tanto que ver, y unas ganas casi incontrolables de tocar. Estábamos dando vueltas en la entrada de aquella casa vuelta galería de arte, uno halaba de la camisa al otro para llamar la atención sobre cada carnaval de colores que hacia fiesta dentro de nosotros. Éramos dos niños en una dulcería. De pronto una voz nos habló desde lo alto; volteamos muy, pero muy despacio, como cuando te cachan en la movida. Era Tomás, no alcanzamos a entender nada de lo que nos dijo, pero sonreía, así que se nos fue el susto. Bajó muy despacio mientras seguíamos avanzando, retrocediendo, subiendo, bajando: alucinando. Al fin llegó hasta donde estábamos y saludó a Kamilo, le dijo tres o cuatro cosas, el pequeño volteó a verme y me preguntó sobre lo que le había dicho el anfitrión; no sé contesté, pero creo que te está regalando una postal de esas que están en el canasto. Mi hijo se abalanzó sobre las imágenes; eran seis grupos de litografías que Tomás amablemente nos había explicado sobre autores, las técnicas originales y demás. Kamilo lo miraba e intentaba entender; al fin se decidió y señalo con su mano izquierda una, Tomás se la alcanzó y le dijo, es un regalo. Me derretí mientras aquel “curador”, sin saberlo, hacía su trabajo… curar.

Seguimos el viaje por aquella sinfonía de formas y colores, se notaba que una mano había dispuesto cosas simples con tal delicadeza que se habían tornado bellas, que había añejado, fusionado, y dejado al tiempo dar brillo a lo ordinario. Además, estaban los lienzos de varias artistas de varios pintores. El tiempo se fue muy rápido, no sabíamos qué hacer; si dar otra vuelta, simplemente sentarnos un rato. Jugar con lo que se pudiera, y claro, llevarnos algo.

Nos paramos frente a una pintura de “Francisco Guzmán” (creo), y fue lo mejor. Kamilo se puso a explicar qué veía y simplemente se me anudó el cogote escuchando a aquel pequeño hablando del inframundo y cómo de la superficie debemos ir hasta la raíz del fuego para que los volcanes estén en paz y nuestro cielo se mantenga hermoso. Lo mejor, arranca y va a explicársela a Tomás mientras le pide le firme la postal que le había regalado, paró explicándosela a Sabine, su compañera. Sabine escuchó amablemente y abrió los ojos mientras la explicación del muchachito se ayudaba con las manos y hablaba de lo volcánica que es nuestra tierra pero que eso no significa que sea mala, sino que tiene mucha fuerza. Yo, me quedé parado afuera intentando contener lo pluvial de mi ñoñería. Regresó Tomás con la postal firmada, nos despedimos y ese día, nuevamente, fui feliz.

“Uno es lo que ama, no lo que le ama… Eso lo decidí hace mucho tiempo.” (El Ladrón de Orquídeas, Spike Jonze). Y yo, amo a ese muchacho y sus ojos limpios y su corazón abierto y su desfachatez que reparte felicidad por donde pasa.

lunes, 26 de febrero de 2018

A dos manos...




El sol apunta y le da brillo
a esa belleza que suele engullir miradas y corazones
el volcán nos observa desde lejos
pero nada logra distraernos de lo realmente bello
Nosotros.


"Kamilo y yo garabateaando y viéndonos a los ojos luego de estar observando un lago hermoso y un atardecer maravilloso, pues nos pusimos ñoños".

Pez volador




En otra vida fui pez de esos que vuelan
en esta aprendí a nadar y no he de morirme sin aprender a volar
o quizá el viaje final sea como un vuelo infinito.
Ojalá.

Engolar



Engolas todo
hasta el punto de la falsedad más evidente y superficial.

viernes, 23 de febrero de 2018

Perfidias y vendettas






Ahora que estoy libre
me hablan de cuando estuve preso
y lo tonto que fui
ningún borracho traga lumbre
y lo mío era delirio
hambre de cosas pequeñitas
mañas de cuervo llevando al nido lo que fuera útil en cada vuelo.

La perfidia y la vendetta son quimeras estériles cuando se buscan sonrisas venideras.

A dos manos...


El sol apunta y le da brillo
a esa belleza que suele engullir miradas y corazones
el volcán nos observa desde lejos
pero nada logra distraernos de lo realmente bello
                                                                              Nosotros.



"Kamilo y Danilo" (Nuestra primera creación juntos).

martes, 20 de febrero de 2018

Sinuosos silbidos





Este viento que suena a silencio
dice mucho
ojalá y dejará de soplar por un instante
tan solo para escucharme
y dejar de inventarle amores y abandonos
a sus sinuosos silbidos.

Un niño y una caracola



Un par de palabras
viajan por un embudo
caracolesco
marino
y llegan a su destino
al final de su pintoresco
camino
donde juegan a ser escuchadas por siempre
como murmullo
insistente
de aquello que un niño alguna vez fabricó dulcemente:
sonríe
dicen al que alza su sonora morada
sonríe
que la vida es juego y mascarada...


El rastro pequeño de sus pies
se va borrando
mientras se le ve alejarse con una caracola...

Luces y cuartillas




Luces de éste tiempo
verdes
rojas y amarillas
no pretendan como los vientos
dictarme cuáles deben ser mis cruces
anhelos
y pesadillas.
Ya me apaño con éstas y otras cuartillas...

viernes, 9 de febrero de 2018

Enamorarse de una mentira







Si no se han atrevido a equivocarse dulcemente
a pecar con lujuria
si no saben de qué va saltar al vacío
sin redes
si no han cortado flores del jardín de la abuela
o viajado leguas y leguas y leguas
solo para sentir el rasposo gusto de un animal comiéndoles las ganas
y al contrario
solo han tenido orgasmos viéndonos amarnos mientras nos matamos:
ustedes no saben lo que es amar
no nos pidan suspirar y enamorarnos de sus mentiras.

miércoles, 7 de febrero de 2018

Sombras sin nosotros





Las sombras pontifican lo que la gente mastica y mastica:

engaños

tozudez

turbación

despeños

rancidez

y advocación.

Las sombras no existen sin nosotros.

Díscolos y retruécanos






Aunque no lo parezca

esto de ser díscolo es más difícil cada día

los avezados en el apaciguamiento

hacen de cada batalla un retruécano

los salmones

son para ellos

de la ruina moral

ejemplo

mientras los ternascos

protagonizan ya la concelebrada misa del orden

aprendidos los trucos del oficio

enseñan con sus arquetipos

a no dejar morir o nacer el tiempo

a disfrutar los seísmos propios de esta hacienda.



Que el futuro nos perdone por dar cobijo al ladrón

y muerte a los injustamente desahuciados.

Deseo





Deseo

simplemente acortar distancia

entre las perlas que fluyen cuando te mojas

llenarte el cuerpo de besos como en otoño hojas

recrear aquella ignota fragancia

con la que fantaseo cada vez que te veo.

Este trópico y su gente enamorada...

      Este trópico está lleno de gente enamorada desmemoriada un día subimos a las nubes sobre el mar y al día siguiente nos hacemos...