domingo, 29 de mayo de 2011

La profesión de Déspota




Para ser un déspota, hay que pasar el primer año de adulación a los poderosos, el segundo de liquidación de las viejas amistades que nos hacen recordar nuestro pasado humilde y, la creación de un concejo de lambiscones.  Tercer año, perfeccionamiento del delirio de grandeza.  Cuarto y último año, arbitrariedades a toda orquesta.  Esa es la receta que nos da Germán Valdés “Tin Tan”, en la adaptación de 1956 de la Novela “La vida inútil de Pito Pérez”.

La novela es “el relato de un ahogado que mira la tristeza de lo que fue su vida”.  En uno de los momentos más importantes de la cinta, el personaje principal habla con un poeta, relatándole su vida y experiencias, su aprendizaje y reflexiones.  Pito Peréz se ha dado cuenta que de los pobres abusan todos los que tienen autoridad, aunque también reflexiona que el que es tonto, déspota o sinvergüenza, lo mismo lo es de cacique de un pueblo que de ministro en la ciudad, es decir, como decía Rubén Bládes, el poder no corrompe, desenmascara.

Ojalá que la realidad tan ríspida de este país no nos haga ahogarnos y mirar hacia atrás con tristeza dentro de algunos años, lucharemos para que no sea así, donde sea, y ojalá que los que simplemente blanden dedos acusatorios y se dan baños de pureza moral, ética o revolucionaria, no se ahoguen tampoco.  Los que critican desde la derecha se pueden ahogar si quieren.


sábado, 28 de mayo de 2011

Tengo el alma "acariñada"


Hoy me dieron ganas de ternura, te pensaba y solo lograba derretirme imaginando tus pequeñitas manos, tus pies perfectos, tu rostro bello y en paz, tu corazón nuevo. Viniste a corregir cada imperfección y cada cicatriz, desde que apareciste tengo el alma “acariñada”. Patojo, Kamilo, Te amo.

miércoles, 25 de mayo de 2011

Se aceptan ideas para escapar de hoyos negros





El financiamiento de las campañas políticas son un hoyo negro, se traga todo lo que se acerca y está a su derredor, paradójicamente inicia con la muerte de una gigante roja, estrella de gran masa o lo que podríamos llamar metafóricamente “una estrella roja”, esperemos que esta metáfora no resulte en una descripción sobre los ideales de izquierda y la sobrevivencia política institucional o de individuos en instituciones político partidarias.

Esta acción extrema de conseguir financiamiento, aceptar, de carácter sumamente crítico, práctico, pragmático, es siempre llevada a los límites posibles.  ¿Pero cuáles son esos límites posibles?  Y bueno, existe un dato harto conocido, y es que se financia a quien pueda retribuir el gasto, es decir se invierte.  Y los únicos que pueden tener el don de la reciprocidad son los que tienen altas o certeras posibilidades de ganar, entrar, quedar.

Ahora bien, si no se tiene nada que ofrecer para que te financien, y si además no estás dispuesto a “matar a ninguna estrella roja”, qué coño hacer para poner en marcha una campaña en la era comunicacional mas mediática y esclava del marketing que haya existido.

Diga lo que diga cualquiera, político, cacifero, periodista, analista, poeta, intelectual, activista, militante, notable, y etcéteras, las cuestiones estructurales no se resuelven de la noche a la mañana, menos en un país como el nuestro.  Las crisis que vivimos en Guatemala, que bien podrían ser un pequeño laboratorio de crisis mundiales, van desde las ecológicas hasta las económicas, éticas, políticas, civilizatorias.

Pero a dónde quiero llegar con todo esto, pues a que las grandes campañas que ofrecen el cielo y la tierra en un tris tras, están  totalmente alejadas  de la realidad, las campañas millonarias que se dedican a atacar al oponente más fuerte, quieren ganar la elección, no resolver nada.  Esto nos deja en la situación de que si se plantean cosas serias, profundas y estructurales, la campaña será derrotada por aburrida e inútil.

Qué hacemos entonces los que no podemos obtener financiamiento, los que no queremos competir en el concurso de quién tiene la campaña más cara, los que queremos hablar y trabajar en la transformación profunda del país, y además, qué hacemos los que vamos en una posición discreta, por utilizar un eufemismo elegante.

Compañeros y compañeras, se aceptan ideas para escapar de los hoyos negros, yo tomaré unas de mi querido Alekos Panagulis, miembro de la resistencia griega quien fue autor de un fallido atentado contra el jefe de la dictadura griega Yorgos Papadopulos.  Alekos fue detenido y condenado a muerte, pero al final solo pasó 5 años en prisión (dándole una lata a sus carceleros…), al salir fue electo diputado y sus votantes fueron los excluidos, su campaña la hizo pobremente, con carbón en las paredes…



P.D.  Si tienen ocasión lean el libro, se llama “Un Hombre” de Oriana Fallaci.

GRACIAS COCO POR REGALARME EL LIBRO HACE TANTOS AÑOS, ME SIMBRASTE EL ALMA.

lunes, 23 de mayo de 2011

El Pendejo de al lado...






A ese ni caso.  Cuesta, porque a veces dan ganas de ponerle toditita la atención a ese que por la espalda de mete “tamañote cuchillote” mientras te abraza y te saluda con candor.  Cuesta no darle una trompada que le llene toda la jeta y gritarle con toda la propiedad del mundo que es una nigua y un bicho egoísta.

Pero en realidad no hay que perder tiempo con el pendejo de al lado, hay que pensar en el Sistema, que por cierto está lleno de este tipo de pendejos, pero que son producidos estructuralmente, y a esas causas estructurales de nuestra desazón es a las que tenemos que combatir con toda nuestra alma.

Cuando alguien se muere por un puesto para tener inmunidad, porque alguna cola tiene que le machuquen, porque cree que su “falo” será más grande, porque siente que tendrá “poder”, pos ese es el pendejo de al lado.  Insisto en lo que dice Holloway, “el poder hacer” es una herramienta, un arma, sin importar si se es candidato o no, lo que importa es que hagamos desde nuestra trinchera lo correcto, lo ético, lo diáfano.  Burócrata, carpintero, intelectual, obrero, sindicalista, empresario, artista, profesional, merolico, anarquista, comunista, o lo que seamos y hagamos, debemos serlo y hacerlo conscientes de que el fin no justifica los medios y que debemos ser congruentes en nuestros hechos y palabras.  Es decir, en no convertirnos en el pendejo de al lado.

El pendejo de al lado es intrascendente, se quedará solo cuando la Revolución Civilizatoria reclute a Tirios y Troyanos, los que ven solo el derecho de su nariz y creen que hay una única manera de cambiar el mundo: teniendo ellos poder, pues pasarán a joderse un poquitito y a irse también un poquitito a la mierda.

QUE VIVA LA REVOLUCIÓN CONTRA LOS PENDEJOS

martes, 17 de mayo de 2011

¿Tons qué, ahora Chitón o como Chorcha?





Pos no, ahora, como “chorcha”, pero chorcha que se sabe “sanatevergueador”.  Ahora que se tiene un resquicio, una grieta, a meterle una cuña con toda la pasión y el ardor posible, porque ya ha pasado mucho tiempo para andar con medias tintas y pendejadas, ahora a ponerlo todo, no por una candidatura únicamente, sino por lo que se me ha quedado, y se le ha quedado a toda la gente que he conocido y he amado.

Mucho tiempo tuvimos que hablar quedito, compartimentamente, en contactos subversivos, lejos, de noche, a oscuras, escondiéndonos, negándonos a gritar BASTA, a llevar el pelo largo, pircings, tatuajes, pero sobre todo, IDEAS TATUADAS CON FUEGO en el alma, ideas que son peores y mejores que la propia conciencia.  Ideas que no nos dejan dormir, ni respirar si no son realizadas con disciplina, cotidianamente y principalmente, si no son realizadas cuando nadie nos ve.

Qué hacer, tomar un fusil, alejarse de lo público y empequeñecer y vivir de quimeras, o tragar sapos, mierda y demases y dar lo último que queda, lo último que quizá sea lo más importante, la esencia de todo nuestra ternura, de todo nuestro amor, de toda nuestra rabia, de todo nuestro veneno.

Yo, y solo yo, decido quedarme, a pesar de cómo me atormentan los besos de nuestros compañeros y compañeras muertas, me quedo a esta quijotada que de ser un fiasco ya sé que me la beberé solo y con aquel gusto del que dice que “cuando la vida es un martirio el suicidio es un deber”, pero que si sale con bien, muchos otros estarán queriendo decir y ser la esencia de la maravilla y acuerpar lo digno y lo rebelde, pues bien, para una y otra cosa estamos en nuestro punto exacto.

Muchá, solo quien ama vuela…y somos los Rebeldes que luchamos contra el Sistema, los que más amamos.

sábado, 7 de mayo de 2011

Que nadie se confunda, aquí no ha pasado nada. Pero puede pasar...






Esta primavera nuestra, tan sopapeada y chamuscada, no reverdecerá solo con un poquito de cuidado o un chorrito de agua, es mucho lo que hay que hacer, trabajar, luchar, muchas batallas quedan por ganar para hacer de este país un lugar digno y civilizado donde vivir.

A pesar de estar adentro, no es fácil, dentro la cosa es jodida, se encuentra uno con cualquier cantidad de alimañas y arribistas que se suben sobre quien sea y lo que sea, para aprovecharse de su lugar para petrificar y petrificarse en el Sistema.  Hay que saber cuándo y hasta donde deben subir los decibeles de nuestros gritos, hay que saber que tan fuerte y tupido hay que somatar la mesa, hay que saber cuál es la línea que no debemos rebasar.  Y no es fácil.

En las actuales condiciones, al Sistema hay que avanzarle sistemáticamente, atacando lugares clave, revitalizando lo social, aliarnos con los trabajadores y campesinos, ocupando sus organizaciones también posiciones estratégicas y bombardeando de propuestas y luchas sociales al Estado.  Años y años de trabajo se necesitan en esa vía.

Hay que juntarnos, decirnos las cosas con madurez, trabajar y avanzar.  Que nadie se confunda, aquí no ha pasado nada, pero puede pasar.


lunes, 2 de mayo de 2011

La Épica de la Democracia





“Y sin embargo”, decía Fidel en un discurso a la nación en 1959, “…queda mucho por hacer todavía. No nos engañemos creyendo que en lo adelante todo será fácil, quizás en lo adelante, todo sea más difícil, decir la verdad es deber de todo revolucionario”.

Hablar y decir la verdad es realmente difícil en un contexto político y electoral, donde la mentira y el engaño son moneda corriente.  Por un voto, se miente, se engaña, se dice la verdad a medias, se dicen mentirillas, se presume de atribuciones que no se tendrán, se olvida la ética política, no digamos la ética revolucionaria y el “fin” justifica los “medios”, en este caso, el fin justifica la mentira.  Pues no.  No hay que mentir.

Queda mucho por hacer y no debemos engañarnos, en adelante todo será más difícil, porque si se avanza debe ser con la verdad, sin prometer empleos, sino pedir disposición al trabajo creador que debe transformar, revolucionar los quehaceres cotidianos, burocráticos, y tornarlos en aventuras transgresoras del sistema.


Es necesario hablar con claridad, llamar a las cosas por su nombre, si alguien es corrupto, lo es, punto.  Si algo no está bien hecho, no lo está.  Si alguien se aprovecha de alguien, se dice, igual hay que decir las cosas buenas, incluso si se habla de los adversarios, y por supuesto, hay que hablar de “nuestras” cosas buenas, que no son elucubraciones propias o novedosas, simplemente son ideas sociales que deben profundizarse, volverse sistémicas, tocar, conmover a la sociedad para ir pasando de la barbarie en la que vivimos a una sociedad civilizada que se apoya entre sí y busca algo que va más allá de la simple acumulación de recursos o la satisfacción material.

No será fácil porque en un país donde nos tienen acostumbrados a soportar en silencio el abuso, hablar, decir la verdad, es insolencia, es insolencia que debe ser castigada.

Para avanzar tenemos nuestro “poder hacer”, poder hacer que debe generar opinión, pública y publicada, las acciones fieles a nuestra formación, a nuestros maestros y maestras, nuestros principios rebeldes y revolucionarios, nuestra disciplina y lealtad a las causas “anti sistema”, de clase, ideológicas.   Cuando Fidel hablaba de no engañarse, lo decía en un contexto de victoria, acá, las batallas aún están en ciernes, y para nuestro momento en la historia, nos referimos a la batalla épica por la democracia.

Este trópico y su gente enamorada...

      Este trópico está lleno de gente enamorada desmemoriada un día subimos a las nubes sobre el mar y al día siguiente nos hacemos...