martes, 24 de noviembre de 2015

Sirenas y venenos

De las musas escojo la sirena
que con su canto
me envenena
me deja sin paz 
entre los harapos y la pena
de un amor desenfrenado
a veces chato
otras rapaz
pero siempre condenado,
a sobrevivir en los montes habitados
por colibríes 
búhos
y seres alados
aunque se muerdan en soledades
las flores sin sus néctares 
animales de muchos ojos 
y puertas sin candados.

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